Dueños de propiedades resignan hasta 15% de su valor para cerrar la venta
En un contexto de exceso de oferta de inmuebles y pocas operaciones, continúa el sinceramiento de precios. En el primer trimestre, hubo 5.000 escrituraciones, una baja del 5% con respecto a 2021.

Desde que se inició la pandemia, el mercado inmobiliario asiste a un sinceramiento de precios que, por ahora, no termina de repercutir favorablemente en las ventas.
De hecho, en el primer trimestre del año, se realizaron poco más de 5.000 operaciones de venta de propiedades, lo que representa una baja del 5% con respecto al mismo período del año anterior, según datos del Colegio de Escribanos de la Ciudad de Buenos Aires.
En ese contexto, hay especialistas que aseguran que esa tendencia a la baja continuará durante 2022. "Está a la vista que las pocas operaciones que se están haciendo son las que tienen una tasa de descuento considerable, entre el 10% y el 15 por ciento. Sigue habiendo una sobre oferta de stock en venta, producto de varias cuestiones, entre la más importante la nueva ley de alquileres. Creemos que es un trabajo colectivo de todos los profesionales inmobiliarios para lograr que se active nuevamente el mercado", concluyó Ramiro Álvarez de Ralva Negocios Inmobiliarios.
El mercado de ventas inmobiliarias maneja dos variables que se han mantenido constantes: por un lado, el aumento de la cantidad de propiedades a vender, y por el otro, una baja en los precios. Sin embargo, detrás de toda "crisis" siempre hay una reactivación: "Consideramos que el 2022 puede ser el puntapié inicial para que esto suceda. Sin dudas que es un año para aprovechar lo que la pandemia nos deja: precios y costos bajos para comenzar emprendimientos o adquirir propiedades y esperar su revalorización", sostiene Matías Towers, Director Comercial de la proptech Mudafy.
Por su parte, Nicolás Corvalan, Gerente Comercial de Tizado, coincide con la visión que tienen sus colegas con respecto al comportamiento de los precios. "Vimos un ajuste en todo el 2021 y continuó la tendencia a comienzos del 2022. Con este escenario, las unidades que corrigieron sus valores hacia la baja están encontrando demanda y los inmuebles que se encuentran dentro de los nuevos parámetros de precios tienen buenos niveles de rotación. En el mercado de la Ciudad de Buenos Aires hay una brecha de precios muy grande, sobre todo entre el stock disponible y la nueva oferta que se vuelca al mercado".
Compradores
Un punto de conexión entre los especialistas es que, en este nuevo contexto, se produjo un cambio del perfil del comprador. "Hoy vemos que hay más demanda de usuarios finales que de inversores. Por un lado, porque son más los que necesitan un nuevo lugar para vivir, con nuevos deseos sobre esta vivienda, que aquellos que quieren invertir debido a la situación económica particular de Argentina", añadió el consultor de real estate Daniel Bryn.
En cuanto a las preferencias de los compradores, Miguel O'Reilly, titular de O'Reilly Propiedades, indica que la ubicación es lo más influyente, pero cierto perfil de cliente está dispuesto a sacrificar la comodidad de una buena locación si el proyecto inmobiliario ofrece una buena propuesta en materia de servicios y amenities".
Fuente: BAE Negocios